40 AÑOS DE VOLUNTAD Y CONSTANCIA
Esfuerzo, perseverancia, tenacidad y dedicación, son tan solo algunos adjetivos que describen a la perfección el andar del Arquitecto Abel Villa y de su hijo, el Licenciado Abel Villa Sánchez en el mundo de la hotelería, al haber logrado consolidar desde cero una marca orgullosamente mexicana y vallartense que este año celebra su 40 Aniversario: Hoteles Buenaventura.
“Yo era un joven de 26 años, un arquitecto con poca experiencia pero con muchas ganas de aprender, y gracias a la oportunidad que me brindó mi padre, iniciamos la construcción de nuestro primer hotel”, con estas palabras, el Arq. Abel, fundador de los Hoteles Buenaventura, recuerda cómo fue que decidieron incursionar en el sector hotelero, con un amplio respaldo familiar que se mantiene intacto hasta la actualidad.
“Mi padre, Ingeniero Civil, con una amplia visión de negocios se me acercó en 1980 y me dijo:
-Flaco, tengo un terreno en Puerto Vallarta, ¿cómo ves, le entramos a hacer algo?, ¿qué se te ocurre? Fue entonces que viendo el crecimiento que había en Vallarta y a pesar de las dificultades del terreno, decidimos iniciar con el proyecto de nuestro primer hotel” agregó el Sr. Villa.
LA SATISFACCIÓN DE HACERLO REALIDAD
La falta de experiencia en la industria de hospitalidad no fue impedimento para iniciar con las operaciones de su primera propiedad, el Hotel Buenaventura Grand.
El arquitecto comenta que casi al término de la obra tuvieron oportunidad de expandir el proyecto, adquiriendo lotes vecinos que permitieron concluir la construcción de la primera fase del hotel en octubre de 1982 con 155 habitaciones, actualmente cuentan con un inventario de 234.
“Nosotros no teníamos experiencia en esta industria, por lo que nos rodeamos de asesores profesionales y contratamos al Sr. Andreas Ruprechter como gerente general, él fue el primer anfitrión de los hoteles. Así iniciamos exitosamente con la parte operativa, otorgándole identidad y un toque personal”.
“El nombre (Buenaventura) surge porque a mi padre le gustaba el hotel ´Buenaventure´ de Los Ángeles, y al ver que la marca estaba disponible en México, lo registramos, pero casualmente coincidió con parte de la historia de la región, ya que el capitán Francisco Cortés de San Buenaventura fue el conquistador de estas tierras”.
HOSPITALIDAD VALLARTENSE
El crecimiento y expansión no tardaron en llegar. El éxito derivado fue tal, que siete años después se vieron motivados a buscar otra propiedad en Puerto Vallarta. Justo en es ese momento se presentó la oportunidad de adquirir un hotel llamado Hacienda del Lobo, el cual necesitaba de una reconstrucción total, fue así que pusieron manos a la obra para iniciar con los trabajos en 1988 e inaugurarlo en diciembre del siguiente año.
A lo largo de la vida puede haber situaciones difíciles que obligan a cambiar el rumbo, sin embargo, el arquitecto Villa ha enfrentado estas circunstancias con determinación.
“Al fallecer mi padre en 1993, sugerí a mis hermanos continuar con el legado de los hoteles y tomé la decisión de estar al frente y asumiendo la dirección general”.
Tres años después de este suceso, los planes de crecimiento continuaron fijos en el horizonte, y en 1996 se abrió una vez más la posibilidad de ampliar su portafolio de propiedades cuando un amigo le contó sobre la oportunidad de comprar un terreno contiguo al hotel Buenaventura Grand.
“Lo adquirimos con grandes esfuerzos, iniciando desde cero con un nuevo hotel que se inauguró en diciembre de 1999 bajo el nombre de Torre Buenaventura, y unos meses después decidí cambiar su nombre a Villa Premiere; siendo este más exclusivo e innovador con concepto solo adultos; lo que nos permitió llegar a un segmento de mercado diferente que en ese momento no estaba siendo atendido”.
“Desde entonces hemos estado en constante innovación, tanto en la infraestructura, como en capacitar a nuestros colaboradores, con una cultura empresarial activa y manteniendo un sello de servicio personalizado”.
LA VOCACIÓN SE LLEVA EN LA SANGRE
La familia siempre ha sido uno de los pilares de Hoteles Buenaventura, muestra de ello es que parte de su historia a través de 40 años ha sido escrita por tres generaciones, siendo el Lic. Abel Villa Sánchez, la tercera de ellas y quien en la actualidad lleva la dirección general de la empresa.
Abel tuvo una vocación nata hacia la hotelería, y es que desde pequeño se vio envuelto en esa esencia, desarrollando así el sentido de pertenencia, apropiación, cuidado y compromiso hacia la compañía.
Esta base se vio reforzada con un posgrado en hotelería, y su incorporación a los hoteles sucedió de forma natural y transitoria, pasando por distintas áreas hasta asumir el cargo de director general a partir del 2016.
“Fue una decisión natural elegir la carrera de administración hotelera, pues desde que era niño pasé mucho tiempo en los hoteles y siempre asocié el trabajo con la hotelería” refuerza el Lic. Abel.
Parte de su formación profesional se dio en uno de los mejores colegios en EE.UU., el Conrad N. Hilton College of Hotel & Restaurant Management en la Universidad de Houston, y una vez culminada, laboró un tiempo en la misma ciudad hasta que se incorporó a un programa de entrenamiento gerencial con la cadena Hilton, donde trabajó durante tres años en hoteles de San Juan, Puerto Rico y Buenos Aires, Argentina.
“Este tiempo me permitió tener una mejor y más amplia noción operativa del negocio y enriquecer mi experiencia.
En 2009 decidí regresar a Puerto Vallarta a trabajar en los Hoteles Buenaventura; aunque mi llegada a la empresa no fue como hubiera esperado, fue un año difícil, con la influenza y el inicio de una crisis financiera, sin embargo fue un gran aprendizaje… ¡así comenzó mi aventura!”.
ENCONTRANDO EL BALANCE
Poder trabajar en unión y en beneficio de la empresa es un orgullo que comparten padre e hijo, siendo la confianza y el compromiso las virtudes que rigen internamente y que han hecho que todo fluya con facilidad.
“La combinación de experiencia, relaciones y sensibilidad arquitectónica de mi padre y mi input comercial y administrativo con conocimientos tecnológicos nos han permitido hacer una buena sinergia de fortalezas para seguir mejorando nuestros productos. Por lo mismo, considero que la cultura empresarial y la experiencia que hoy se vive en los hoteles tiene en gran parte la esencia de los dos”, añadió el Lic. Abel.
PERSISTIENDO EN LA ADVERSIDAD
A lo largo de cuatro décadas han enfrentado una serie de situaciones que los han hecho replantear el rumbo de la compañía.
“Hemos vivido situaciones complicadas, como la devaluación de 1995, los ataques del 9/11 en EE.UU., el Huracán Kenna en 2002, la Influenza H1N1, la crisis financiera en 2009 y la más reciente, la pandemia por el COVID-19. Todos han sido momentos de gran reto donde se ha visto amenazada la subsistencia de la empresa”.
Sin embargo, han sabido persistir, trazando nuevas metas, estrategias sólidas y consolidando sus pilares con la constante re-inversión en remodelaciones, el avance hacia la institucionalización y el fortalecimiento de la cultura empresarial.
“La decisión de haber asumido este compromiso, me ha dejado grandes enseñanzas y satisfacciones en lo personal y profesional. Le agradezco a Dios, a mi familia y a todos los colaboradores que nos han acompañado en este camino”. Arq. Abel Villa
“Tengan la seguridad que seguiremos a la vanguardia, manteniendo nuestros distintivos, certificaciones, y alcanzando siempre la completa satisfacción de nuestros huéspedes, ofreciendo los mejores conceptos de relajación, playa, romance y tradiciones en Puerto Vallarta”, agregaron.