EN MÉXICO HAY VIDA EN LA MUERTE
Llegó la calaca
brincando con toda la
industria turística
había escuchado que 2020 la había
dejado raquítica.
Traía la guadaña en mano para darle
plena sepultura
pero olvidó la pobre huesuda que en México
lo que sobra es cultura.
El turismo vive y resiste, pues su calidez
siempre persiste,
¡La creíste fácil calaca, pero nuestra
naturaleza no la consumiste!
En México amamos lo nuestro y
viajar es nuestro talento,
te harán falta otras mil
pandemias antes de
acabar con nuestro
último aliento.
En México no le tememos ni a la misma muerte, al contrario, la respetamos y festejamos con ella, es el 1 y 2 de noviembre una de las fechas que más nos conectan con nuestras raíces, el Día de Muertos tiene un halo prehispánico que nos hace entender nuestro pasado.
De norte a sur y de este a oeste cada entidad de la República tiene sus tradiciones para recordar a los que ya no están, y aunque éste será un año atípico donde los eventos masivos y los cementerios llenos de vida no reciban al visitante mundano, sí estarán esperando a nuestros seres queridos con su festín.
Se han cancelado desfiles de catrinas o eventos como los del poblado de Mixquic, en el Estado de México, otros tantos como en Janitzio o pueblos de Oaxaca, tendrán accesos completamente controlados, por lo que si no has reservado lo mejor es no hacer aglomeración.
El Día de Muertos se celebra hasta en el hogar, por algo es catalogado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, basta con que elabores un altar, decores con cempasúchil o hagas calaveritas, ¡haz que la festividad de recibir a nuestros seres queridos se sienta desde tu hogar!
Hay elementos que no deben faltar en estas fechas, como la flor de cempasúchil, el papel picado o las calaveritas, te contamos un poco de su historia y aquellos lugares de la República que son referente para ver de cerca su producción o nacimiento, ¡anótalos para que el próximo año no se te vayan vivos!
LAS FLORES DEL MICTLÁN
Uno de los íconos más relevantes que delata que el Día de Muertos se aproxima es la flor de cempasúchil, su vocablo proviene del náhuatl Cempohualxochitl, que significa veinte flores o varias flores.
El cempasúchil florece únicamente en estas fechas, después de las lluvias, y México posee 35 de las 58 especies que existen en América, su simbología es tan bella como profunda, pues su color para nuestros antepasados simbolizaba el sol y sus pétalos eran puestos como caminos hasta el inicio del altar para guiar a las almas al festín en su honor.
En México los Estados mayor cultivo de esta flor son: Puebla, Hidalgo, Estado de México, Guerrero, Michoacán, Tlaxcala, San Luis Potosí, Morelos, Oaxaca y Durango.
Los campos cubiertos de amarillo y con los bellos pétalos que se asoman de la tierra son una belleza en sí, pero hay municipios que se han vuelto predilectos por la naturaleza que los rodea, como volcanes, lagos o edificaciones y se ganan a pulso una visita en el temporal para contemplar la majestuosidad.
Estos son algunos sitios que debes apuntar en tu lista a visitar: Zimatlán de Álvarez y Oaxaca, Oaxaca; Xochimilco y Atlixco, Edo. de México y Cholula, Puebla.
HAY COLOR EN LA MUERTE
El colorido del papel picado resalta el Día de Muertos y aunque es utilizado para otras festividades como fiestas patrias o quermeses, su nacimiento radica en esta fecha.
Ver plasmadas catrinas, flores, cruces y más en el delicado papel de china es un trabajo que requiere paciencia y esmero y sobre todo es un arte 100% mexicana. Es el municipio de San Salvador Huixcolotla, Puebla, la cuna de este trabajo artesanal; ubicado en el centro de Puebla el 35% de su población se dedica a este oficio.
Al visitar Huixcolotla puedes ver de primera mano a los artesanos con su cincel, lámina y por supuesto el papel de china que en minutos producen manualmente millares de cadenas de papel de china.
Se dice que este oficio lo heredaron desde que el lugar era habitado por grupos indígenas sólo que antes se usaba el papel de amate (producido con corteza de árboles locales) que tras la colonización fue sustituido por el de China. ¡Ahora sabes de un nuevo lugar a visitar en Puebla!
LAS MIGAS DE LA VIDA
Azucarado, con sabor a azahar, espolvoreado de ajonjolí, color rosa, de forma redonda o hasta forma humana es como puedes encontrar al pan de muerto.
Esta delicia sólo la producen los panaderos en esta temporada y su forma redonda y con “huesitos” encima hace alusión a los sacrificios humanos que en tiempos prehispánicos se realizaban y que se daban como ofrenda a los dioses… Lo bueno es que ahora su representación es más dulce.
Aunque esta versión redonda es la que más conocemos hay estados que realizan otras versiones, como Guanajuato en la que es un aro espolvoreado de azúcar color rosa mexicano, o en Puebla donde literal el pan de muerto tiene forma humana, con pies, brazos y cabeza; en Oaxaca respetan los ingredientes ancestrales y fermentan la masa con pulque.
No importa el Estado que visites el Día de Muertos, pregunta por su pan de muertos tradicional, ¡puedes llevarte una sorpresa!
PONLE AZÚCAR AL MÁS ALLÁ
Las calaveritas son indispensables en las ofrendas del Día de Muertos, ya sea de azúcar, amaranto y hasta de chocolate, las manos de los artesanos mexicanos las llenan de color, figuras y hasta el nombre de las personas a quien dediques el altar.
Se dice que su simbología es el portal que permite que las almas lleguen del Mictlán a la tierra, incluso nuestros antepasados colocaban cráneos humanos o de animales. En México desde mediados de octubre hay ferias donde verás a centenares de artesanos exhibiendo su trabajo y que en ese instante te decoran tu calaverita, algunas a no perderte son la del Alfeñique, en Toluca; el Portal Hidalgo, en Pátzcuaro; el Jardín Guerrero, en Querétaro o la Feria del Cartón y del Juguete que se coloca en el Parque Morelos, en Guadalajara.
Motivos para descubrir México durante las festividades del Día de Muertos sobran, sal de la ruta y visita más municipios que aunque no sean tan conocidos tienen en su esencia cachitos de tradición, ¡mientras nuestras tradiciones vivan el turismo respirará con fuerza!