Sol, arena, olas… máscaras y quebradoras en el Ring & Rock StAAArs de Hard Rock Hotels
El misticismo de unos ojos que se asoman tras una máscara, dos cuerpos chocando en el aire después de impulsarse con las cuerdas del ring y un público que grita sin filtro y con locura, como si se tratara de una terapia masiva… ésta es una de las postales mentales que regaló el Ring & Rock StAAArs 2018.
Hard Rock Hotel Riviera Maya fue sede del evento que tiene ocho años de regalar momentos de euforia y diversión; toma nota de este espectáculo deportivo para que a tus próximos viajeros les regales días de playa, sol ¡y mucha Lucha Libre Mexicana!
PRIMER ASALTO
Una nueva generación de luchadores de la AAA apoyados en leyendas del ring, fueron los protagonistas de esta edición del Ring & Rock StAAArs; durante tres días las instalaciones del Hard Rock Hotel Riviera Maya no sólo brillaron con la lucha estelar, sino que acercaron a los huéspedes con la cultura de la lucha libre.
Laredo Kid, Golden Magic, El Hijo del Vikingo, Keyra, Lady Maravilla, Vanilla, Tito Santana, Sammy Guevara, Scarlett B, La Parka, La Hiedra y Psycho Clown fueron parte de la veintena de talento que no dudó en compartir momentos con los huéspedes.
Todo inició con una fiesta de espuma, donde los pequeños brincaban y los adultos se sumergían entre concursos y una lluvia de fotos para captar el momento. Al día siguiente, las caras de asombro se hicieron notar entre los más pequeños cuando un desfile de máscaras llegó desde temprano a la alberca de Hacienda (área familiar del hotel) para realizar con ellos toda una rutina de calentamientos y hasta luchas acuáticas.
En ese momento no importó quién era rudo o técnico, el agua disolvió la competencia del ring y todos se volvieron un equipo que mostraba a chicos y grandes cómo realizar trucos ¡y por supuesto, unas luchitas en el agua!
La Lucha Libre llegó a México con la intervención francesa, a mediados del siglo XIX; sin embargo, fue en las primeras dos décadas de 1900 cuando los luchadores mexicanos la dotaron de una identidad propia con sus acrobacias en el aire dentro y fuera del ring, y el público mexicano con su folclor la volvió todo un subgénero del espectáculo deportivo.
QUEBRADORAS, CANDADOS… ¡Y A LUCHAR!
En la explanada de Hacienda se montó un ring provisional para que todo aquél que quisiera aprender movimientos tomara unas clases en la “Clínica de Lucha Libre”, teniendo como maestros a nada más y nada menos que La Parka y La Hiedra.
Los más pequeños gritaban de la emoción cuando La Parka los tomaba por el aire y enseñaba cómo impulsarse desde las cuerdas.
“Vi luchar al Pirata Morgan contra Atlantis y me cayó en los pies el Pirata Morgan, ahí dije: ‘Yo quiero ser luchador’ y empecé a buscar y buscar dónde entrenar, hasta que lo encontré; yo debuté a los 19 años”, contaba La Parka, quien después de ser todo un couch para los pequeños, con más de 30 años de carrera y su personalidad “hippie”, como él mismo lo dice, ha logrado ser uno de los luchadores más queridos.
ALFOMBRA ROJA… Y MUY RUDA
¿Quién dijo que el glamour está peleado con la rudeza? Antes de las luchas, el hotel y la AAA organizaron una alfombra roja donde todos los luchadores desfilaron uno a uno, envueltos en sus trajes perfectos que conjugan brillos, látex, pintura y mucha bravura.
Los niños parecían todos unos paparazzi al sacar los celulares, tablets y más aditamentos tecnológicos para lograr su foto con pose ruda, los adultos no se quedaron atrás y buscaban a su luchador favorito para obtener una imagen juntos.
HORA DEL ESPECTÁCULO
El Centro de Convenciones de HRH Riviera Maya se convirtió en una pequeña arena que se fue llenando de huéspedes emocionados, que portaban máscaras y entraban cual fieras a punto de un combate.
Aunque las cinco luchas fueron de exhibición, el ambiente se desató como si se estuvieran apostando las máscaras. Los primeros en salir fueron cuatro luchadores locales que mostraron que Quintana Roo tiene tela de dónde cortar.
El Hijo del Vikingo y Angelikal elevaron la lucha por los aires con sus movimientos acrobáticos contra Jack Evans y Australian Suicide; el lado femenino mostró todo su poder cuando Lady Maravilla y Keyra vencieron a Scarlett B y Vanilla.
Ya con la pólvora encendida, Golden Magic, Laredo Kid y Sammy Guevara no dudaron en salir del ring para mezclar los golpes entre el público y acabar con los luchadores del Poder del Norte.
¡La lucha estelar llegó! Y desde su salida Psycho Clown, Fénix, el Hijo del Fantasma y Brian Cage auguraban mucha acción; hubo momentos en que la locura de Psycho tomó hasta el referi, mientras los asistentes explotaban en risas y gritos de ¡sí se puede, sí se puede!
Sin duda este Rock & Ring StAAArs reforzó el gusto por la Lucha Libre Mexicana entre quienes ya la siguen, y ganó nuevos seguidores entre todos los huéspedes que tuvieron un acercamiento cara a cara con este deporte de raíces muy mexicanas.