Lorenzo Iván Hernández Director General, Viajar LH
Lorenzo creció con la empresa que su padre fundó en 2006, los amigos de su papá lo vieron crecer ante sus ojos y son familia además de socios comerciales, ese cariño se refleja en comentarios como el de Pepe Calleja, uno de los grandes amigos de su padre y quien conoce a Lorenzo prácticamente desde que nació: “Lorenzo es mi sobrinote, lo quiero mucho, no tenemos la relación que quisiéramos porque desgraciadamente no coincidimos todas las veces, pero es un tipo queridísimo y uno de los mejores empresarios que hay ahora mismo en México. Como es una persona joven, está entrando con las nuevas generaciones de agentes de viajes y eso es una gran ventaja para él; se hizo cargo de Viajar en un momento de transición y fue capaz de asumir el reto y poco a poco ir creciendo, yo por lo que sé es que actualmente en el mercado de Occidente de México es de las operadoras imprescindibles, tiene un gran futuro por delante con su agencia y con todo lo que pueda desarrollar con todas sus ideas nuevas”, asegura.
Cuando escuchas la palabra “joven”, en ocasiones vienen a la mente conceptos como “inexperiencia” o “falta de seriedad”, como si la juventud fuera un impedimento para ser un buen líder. Sin embargo, al conocer a Lorenzo Iván Hernández, esto es lo último que piensas.
Con un perfil de aparente seriedad y sumamente profesional, Lorenzo (como le gusta que le llamen) podrá ser joven, pero lleva ya nueve años al frente de Viajar LH, operadora mayorista de tradición que tomó de manos de su fallecido padre para inyectarle esa chispa y fuerza que da la inclusión de ideas frescas e innovadoras. “Me gusta buscar combinaciones nuevas a lugares que pocos voltean a ver”, nos cuenta mientras comemos juntos en una cafetería en Madrid, “todos incluyendo nosotros comercializamos el destino del que todos hablan, pero me gusta sondear otras opciones y ubicamos muchos lugares que dentro de un par de años van a ser lo más de moda, tratamos de posicionarlos antes que los demás; también volteamos a ver a esos destinos que por sus situaciones políticas o económicas dejan de estar en el mapa turístico, pero que tienen mucho que ofrecer, y eso nos ha funcionado muy bien, y estoy empezando a trabajar más con ciudades en América porque me quiero enfocar en desarrollar viajes allá”.
Ante nuestros ojos, deja por un momento de ser el directivo que a los 20 años de un momento a otro debió hacerse cargo de la empresa familiar, con todas las dificultades que eso implica, y deja entrever al Lorenzo amigo, amante del futbol y las tortas ahogadas y apasionado de los viajes, que con un trato de confianza y hasta “de cuates” ahora sí parece de su edad y no de los muchos más años que su experiencia y su mano firme hacen suponer, y podemos ver que esa seriedad es sólo parte de su personalidad, sabe distinguir perfectamente cuándo se necesita que aparezca el hombre de negocios y cuándo es factible que asome el Lorenzo relajado que deja correr ese caudal de anécdotas y recuerdos de su vida en el turismo, donde aquí y allá asoma el recuerdo de su papá.
Quienes hacen negocios con él coinciden en que Lorenzo lleva el turismo en la sangre. Al venir de cuna de mayoristas, desde antes de dedicarse al negocio familiar ya estaba inmerso en este mundo, aunque jamás tomó ventaja de su condición y decidió forjarse una carrera por sí mismo, llegando a trabajar en compañías diferentes a la de su familia; esto le sirvió para crecer y foguearse, por lo que cuando llegó el momento de hacerse cargo de Viajar LH, tenía ya experiencia y herramientas que aportar a la empresa, con su estilo vanguardista que procura imprimir en todos y cada uno de sus departamentos, como buen capitán que controla el timón del barco para llevar a su tripulación por las aguas del turismo, sabe que su juventud en este caso es punto a su favor en una industria donde la competencia es tenaz, ya que su idealismo y meticulosidad lo convierten en un perfeccionista (hojeando un ejemplar de nuestra revista, uno puede comprobar ese afán por destacarse del resto, con anuncios limpios y productos llamativos). Él asegura que la clave del éxito para una operadora está en buscar ser diferente y rodearse de los proveedores de más prestigio que garanticen que los clientes finales regresen con una sonrisa, por lo que asiste personalmente a ferias de turismo en México y el mundo, entre ellas FITUR, la Feria de Turismo de Berlín, la de Colombia y muchas más, donde además de sus pendientes, siempre busca conocer u obtener ese contacto extra que sabe le servirá en el futuro. Como muestra de ello, las imágenes donde podemos verlo en acción, negociando el mejor trato con los operadores y receptivos más confiables.
Contrario a algunos jóvenes, Lorenzo no se confía a su conocimiento y por eso se capacita constantemente, documentándose pero también experimentando en carne propia los viajes que promueve su operadora, para poder transmitir esas experiencias de primera mano, lo que hace a través de muchos medios, incluyendo su blog en la web. Cuando visita un destino por motivos laborales, le encanta ir a los estadios y a los puntos menos conocidos, generalmente en solitario, para poder sumergirse mejor en la cultura del lugar.
Nos animamos a preguntarle si está satisfecho con lo que ha logrado en estos años: “Bueno, sacamos adelante la empresa, mi mamá en administración y yo en dirección; hemos crecido pero sé que podemos lograr mucho más y para allá vamos; 2015 será un año clave para nosotros y el año siguiente estaremos celebrando nuestro aniversario 20, así que creo que será un buen momento para voltear atrás y ver si hemos crecido y plantear nuevas metas, siempre hay que tratar de crecer”, concluye.