Dinastía Shafer
Ejemplo de perseverancia, trabajo y responsabilidad es lo que Lucy Shafer hereda a sus hijos: Tony y Lucy, y hoy día, Prisma Operadora es una mayorista de éxito.
Todo comenzó en la ciudad de México de donde Lucy Rodríguez de Shafer, directora general de Prisma Operadora es originaria y donde cursó la carrera de Técnico en Turismo. Comenzó a laborar en una agencia de viajes para después ingresar a Panam, aerolínea donde estuvo 19 años, trece de los cuales fue gerente de cuentas locales en Guadalajara, motivo por el cual llegó a esta ciudad. Al cierre de Panam en 1992, decide, junto con su ya esposo Antonio Shafer, abrir una oficina de representaciones, donde sus primeros clientes fueron Avianca, Aviateca y Taca, entre otras empresas, al tiempo, la compañía tomó formalmente el nombre de Representaciones Prisma y comenzaron a crecer y a representar destinos de Oriente, Estados Unidos, Europa y hoy día se especializan en comercializar viajes a casi todo el mundo, incluso, se distinguen por manejar viajes exóticos e importantes peregrinaciones a lugares de gran interés religioso. “Ya tenemos 21 años en el medio turístico y nos hemos distinguido como una operadora formal que ofrece sólo productos de gran calidad. Una operadora que ante todo, es primero la satisfacción total del viajero final”, nos comenta Lucy. Dos niños crecieron entre boletos de avión y folletos turísticos. . . Al crecer sus hijos dentro de este ámbito del turismo; o decidían quedarse en él o bien, buscar otra carrera completamente diferente. “Nunca me imaginé que optaran por estar conmigo y ayudarme en el negocio, pero les confieso que esta decisión de ambos, es una de las mayores alegrías; y aunque hubieran preferido algo diferente, de igual manera los hubiera apoyado”, destaca Lucy. Hace seis años llegó Tony Shafer Rodríguez a Prisma Operadora Hace seis años de manera formal, su hijo Antonio (Tony) decidió incorporarse a Prisma Operadora, “siempre me gustó viajar, ahorraba dinero y lo primero que hacía era irme de viaje con amigos aunque fuera de mochilazo, además, desde pequeño, -sobre todo en los veranos- le ayudaba a mi mámá como mensajero y en todo lo que podía. Me gusta mucho la historia y la geografía y creo que por eso me incliné a seguir los pasos de ella”, dice. Actualmente, Tony es el encargado del departamento de reservaciones y ventas, pero además de todas sus responsabilidades imparte seminarios de geografía enfocados a destinos turísticos para los agentes de viajes. “Mi mämá, en este rubro del turismo, siempre ha sido mi ejemplo a seguir y si algo le he aprendido y que ha llevado a la empresa al sitio donde hoy está es que si surge un problema con alguno de nuestros clientes, antes de averiguar de quién fue la culpa nos ponemos a resolverlo en el menor tiempo posible. El cliente no debe de pasar contratiempo alguno. Lo resolvemos y ya después analizamos qué fue lo que sucedió”, dice Tony. Su hija Lucy Shafer Rodríguez decidió ingresar a Prisma hace tres años. Lucy, su hija, exploró primero otros campos, claro, dentro de la administración de empresas, carrera que decidió cursar, pero al final, se inclinó por llevar las riendas administrativas de Prisma Operadora. “Me faltaba ese algo que da el turismo, por eso, me incorporé a la empresa familiar, y la verdad no me arrepiento”, destaca. “Lo que me ha dejado huella de mi mamá es el compromiso hacia el trabajo. He aprendido que no importa la hora, si se requiere estar a las 4 de la mañana de pie por algo que la empresa requiere pues adelante, lo primero siempre será lograr la satisfacción de quienes confían en esta empresa para cumplir sus sueños de viajar”, agregó. Las reglas claras y los lazos familiares fuertes. . . Para que una empresa familiar funcione a la perfección es necesario dejar las reglas claras, pero sobre todo, como nos dice Lucy Shafer, “respetar las funciones y las responsabilidades de cada uno. Confieso que no todo ha sido perfecto, hemos tenido contratiempos, pero también los hemos sabido resolver y desde hace tres años desde que mi hija está con nosotros, hemos delimitado bien qué es lo que hace cada uno y nos ayudamos mutuamente cuando así se requiere”. Hoy día, en Prisma Operadora laboran alrededor de 14 personas y aunque esta compañía es el orgullo del matrimonio Shafer, Lucy cree que quizás en un par de años pueda retirarse y dejar en manos de sus hijos totalmente el negocio, “puede ser en ese tiempo, en menos o en más, pero la verdad es que ya casi estoy de salida. Y créanme que me iría muy tranquila al saber que ellos están al frente”, concluyó.