MANOS QUE DAN VIDA: ARTESANÍA MEXICANA
La artesanía mexicana es la máxima expresión de manos que por años han perfeccionado su técnica para conquistar con piezas únicas, llenas de color, formas y materiales.
En México se utilizan cientos de materiales que los artistas encuentran en la naturaleza de su región, como el barro negro, los textiles, la madera, piedras preciosas y mucho más.
Hay que admitir que cada que se realiza un viaje es inevitable acercarse a la artesanía del destino, ya sea comprando algo tradicional o empapándote de su elaboración, incluso hay lugares que abren las puertas de sus talleres para que observes a detalle el proceso. Tal es el caso de talleres de alebrijes en Oaxaca, confecciones de huipiles en Chiapas o el observar la minuciosidad con la que pintan la Talavera en Puebla y Tlaxcala.
A nivel internacional la artesanía mexicana es consentida de países como Australia, Alemania, Canadá, España, EE.UU. e Italia que se encuentran en los principales destinos que la importan. El arte huichol o wixárika es de los consentidos a nivel internacional, haciendo intervenciones en autos clásicos, pianos y hasta medallas deportivas de justas mundiales.
El arte mexicano es parte de nuestras raíces, en tu próximo viaje acércate a él y empápate de su proceso y tradiciones.
El país tiene más de 62 etnias y cada una posee características propias de arte popular, son los grupos indígenas los de mayor arraigo y destreza para crear piezas únicas.
OLINALÁ
En olinalá es una técnica prehispánica que cuenta con Denominación de Origen (DO), es decir que está protegida a nivel legal y gubernamental y sólo se realiza en el municipio homónimo: Olinalá, Guerrero.
Consiste en una técnica de laqueado de objetos de madera, pero no cualquier madera, debe ser la del árbol llamado linaloé.
La pieza que representa este arte es la cajita de olinalá, sin embargo, hay más que son pintadas minuciosamente a mano con pigmentos naturales como el carbón, polvo de piedras o tintes artificiales. La próxima vez que vayas a Guerrero no dudes en escapar a Olinalá y adquirir una pieza que según cuentan en un viaje diplomático la misma Reina Isabel II recibió una bella batea de Olinalá.
TALAVERA
Además de tener DO, la Talavera es la última expresión mexicana que ha sido declarada por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, compartiendo por vez primera en la historia de América un producto con España.
La Talavera adquirió tanto auge en la Colonización que las familias pudientes en Puebla y Tlaxcala no se conformaban con vajillas y jarrones, si no que mandaban cubrir con azulejos cuartos o fachadas completas.
La Talavera de Puebla debe ser trabajado con una mezcla de barro negro y blanco y su decoración debe ser a mano con pigmentos naturales y técnicas de grabado que mezclan las culturas que habitaron México en la colonización: española, indígena, morisca, italiana y hasta china.
ÁMBAR DE CHIAPAS
Esta hermosa resina fósil que se extrae en Chiapas, los grupos étnicos de este Estado a través de los siglos han aprendido ha trabajar tan bien este material que no sólo lo vemos en joyería perfectamente acabada, sino en esculturas, vasijas y reliquias que representan deidades mayas.
Cabe señalar que el ámbar requiere gran trabajo desde su extracción, el pulir y realizar los detallados tan perfectos para que terminen como aretes, anillos o pulseras y otro dato curioso es que su origen no es mineral, si no vegetal, al tratarse de la resina de árboles que escurrió por la corteza de los árboles y que con el paso de miles de años y el contacto con el aire se transformó.
ARTE WIXÁRIKA
Conocido comúnmente como arte huichol, esta técnica la ha hecho popular el grupo étnico wixárika que habita en las sierras de Nayarit, Jalisco y Zacatecas, su colorido y demostración de cultura en sus piezas es tan auténtico que la fama mundial los ha alcanzado e intervienen piezas o exhiben creaciones en lugares como los Emiratos Árabes, EE.UU. o Alemania.
De las piezas más famosas son las tablas de estambre llamadas nierikas, en ellas representan deidades e incluso las visiones que tienen en sus ceremonias con el marakame y en el que ingieren peyote. También están las máscaras cubiertas de chaquira o las piezas de animales de su región que también cubren con este material, ¡y qué decir de sus collares, pulseras y más! Es un trabajo digno de admiración.
ALEBRIJES
¡Cómo no quedarse por horas en los mercados oaxaqueños! Los alebrijes son una de las artesanías mexicanas más conocidas a nivel mundial y ese mundo surrealista que transmiten sus piezas al combinar animales, creando especies fantásticas.
San Martín Tilcajete, Oaxaca, es el pueblo al que se le atañe el origen de los alebrijes, pero también está en el mismo estado la comunidad de San Antonio Arrazola. Se dice que en un inicio se elaboraban de cartón, pero al no ser tan duradero se cambió por los tallados en madera que son finamente pintados a mano por artistas que expresan una gama de coloridos impresionantes.
REBOZOS Y HUIPILES
Los textiles también son parte importante de la cultura mexicana y nuestro mestizaje, cada grupo étnico cuenta con sus bordados que le dan identidad, sus colores y hasta el tipo de textil que utilizan.
Los huipiles en Chiapas son una verdadera exquisitez al observar como trabajan el telar y como posteriormente son bordadas a mano cada uno de los cientos de flores que puede llegar a tener una pieza.
El caso de los rebozos su trabajo completo en telar es digno de destreza, observas a los artesanos estar cambiado de hilo constantemente, moviendo pedales, jalando palancas y apretando estambres, esta técnica aunque fue heredada sin duda la vino a completar el pueblo mexicano.