BEA BARBERO, DIRECTORA CORPORATIVA DE VENTAS DE MARIVAL RESORTS
Hace 25 años Bea llegó por vez primera a Puerto Vallarta, una joven canadiense dispuesta atender al turista que llegaba con la tour operadora que en ese entonces representaba, nunca imaginó que su experiencia en el destino fuera tan gratificante y auténtica que lo convertiría en su hogar.
Hoy Bea Barbero puede anunciar una sólida carrera de 20 años en Marival Resorts (el pasado 3 de enero los cumplió), una trayectoria que está impregnada de conocimientos administrativos, de reservaciones, marketing, operación, ventas y más y que la convierten en la directora corporativa de la cadena hotelera.
Te invitamos a leer esta interesante charla con Bea Barbero, una mujer determinada, organizada y que derrocha pasión por su trabajo y los retos.
“Siento que he logrado mucho y me siento muy orgullosa, porque siendo extranjera y siendo mujer se me han presentado retos, pero me siento confiada, a lo mejor es el hecho que llevo tantos años con una empresa, pero sé visionar y tengo muy marcado lo que puedo y no puedo hacer, cómo negociar y sé el límite al que puedo ir”. – Bea Barbero.
EL PREÁMBULO DE UNA CARRERA
Era la temporada invernal de 1995, Bea Barbero se encontraba en su natal Vancouver, Canadá, trabajando para un tour operadora cuando le ofrecieron la oportunidad de viajar a Puerto Vallarta para ser la representante de la empresa en el destino.
Recuerda que fueron meses llenos de conocimiento y empaparse de amistades y la cultura vallartense, pero había que volver a casa. De regreso en Vancouver el movilizarse por trabajo se convirtió en habito y en un transcurso de dos años viajo por diversas partes del mundo como Hawái e Isla Margarita, en Venezuela, adquiriendo conocimientos diferentes perfiles de conocimientos de la tour operación.
Tras esta experiencia llega un cambio importante en el camino laboral de Bea, la empresa inglesa First Choice Holidays absorbe la operadora en la que se encontraba, brindándole un nuevo abanico de experiencias.
“Me ofrecieron irme a Grecia en una temporada de verano, estuve en Isla de Rodos; también regresé a Venezuela, luego a Cancún y finalmente me dieron a elegir a dónde me gustaría ir, y la verdad de forma instintiva les dije: ‘¿sabes qué?’ Me gustaría regresar a Vallarta’”
SÓLO VENÍA POR UNOS MESES
“Yo tenía 25 años cuando llegué a Vallarta la primera vez y la pasábamos súper bien, éramos un equipo donde salíamos mucho, fue una experiencia muy padre y conocí mucha gente que era de Vallarta y por eso lo sentía con un toque auténtico, cuando me dieron a escoger recordé su cultura, el cómo me sentí cuando estaba aquí y quería vivirlo de nuevo”.
Aunque Vallarta le daba añoranza, Bea relata que ella planeaba permanecer seis meses, tiempo en el que fue adquiriendo más responsabilidades en su oficina, pues los charters provenientes de Canadá también habían aumentado.
Fue al culminar la temporada invernal y con menos movimiento de charters cuando Marival Resorts llegó a su camino.
“Fue chistosa mi llegada con Marival. En el verano, cuando bajaba la temporada de charters yo seguía en Vallarta y me tocaba ir a cubrir los hoteles de Puerto Vallarta y Nuevo Vallarta, como era la única que sabía manejar auto estándar Marival se convirtió en una propiedad a visitar”.
MARIVAL, EL RETO QUE SE CONVIRTIÓ EN FAMILIA
Es en Marival donde conoce a Salvador Ramos, él es quien la invita a unirse al hotel y se convierte en su jefe y mentor, llevando a la par de Marival un proceso de crecimiento y unión en el equipo.
“Fue una cuestión donde fui progresando, para mi Salvador ha sido un gran mentor, yo tenía cero experiencia en la parte hotelera pero a él le pareció interesante mi trayectoria en la tour operación y yo vislumbré un reto. Él me iba enseñando a cómo hacer las cosas a otro nivel de lo que es ventas, porque éramos un hotel y una familia, hacíamos de todo”.
Haciendo recuento de sus 20 años en Marival, recuerda que cuando llegó eran una sola propiedad, la que hoy es Marival Emotions, eran el hotel más grande de la zona con 600 habitaciones, después hubo un proceso de remodelación y quedaron en 497 unidades, pero hoy, entre las tres propiedades de su cartera: Marival Emotions Resort & Suites, Marival Armony Luxury Resort & Suites y Marival Distinct Luxury Residences sumán más de 1,000 cuartos.
UN ASCENSO CONTINUO
Bea inició como asistente de ventas y fue pasando por áreas como las ventas nacionales, internacionales, los grupos, bodas, el sector MICE, hasta alcanzar la gerencia y desde hace tres años ser la directora corporativa de ventas.
“Cuando yo empecé no existían los e-commerce, yo fui agarrando poquito a poco lo que era esta temática, nos fuimos formando, sé desde cotizar, operar, cerrar cuentas, porque éramos así y conforme fuimos creciendo se fue contratando gente, enseñándolos y especializándolos; recuerdo cuando abrió el centro de convenciones, no tenían gran idea de lo que era el marketing del MICE, el dueño nos hizo involucrarnos, aprender, leer, empaparnos en todo antes de abrir un departamento específico”.
Para Bea posicionar Marival y ahora tres propiedades tan diferentes entre sí no ha sido fácil, pues tiene claro que el 70% de sus unidades son multi habitaciones, lo que amerita un enfoque en su mayoría familiar, pero con un trabajo de re branding previo para que cada acción este acorde al entorno actual.
En su mente no está el moverse fuera de Marival, han sido tantas las satisfacciones y crecimiento que la ve como una familia, incluso nos contó emocionada que acaba de adquirir un departamento en Bucerías, porque si hay algo que vislumbra a su futuro es pasar los días de invierno en su querido Puerto Vallarta y el verano en sus raíces y hogar natal, Canadá.
“No me veo fuera del turismo, en algún momento puede que en algo diferente a la hotelería, pero sí dentro del turismo; me gusta el trato con la gente, las ventas, las relaciones públicas, es una vocación que tengo muy clara”