EMMANUEL ZAVALA, EJECUTIVO DE VENTAS NATURLEÓN AGUASCALIENTES
Apenas tenía 23 años cuando Emmanuel
llegó a las oficinas de NaturLeón Aguascalientes;
siendo primerizo en el mundo del
turismo no niega que estaba nervioso, pero
cinco años después, siente que el medio se
ha convertido en su segundo hogar.
“Yo tenía una amistad con Omar Yerena
[hijo de Alonso Yerena, director general
de la mayorista], crecimos juntos, pero en
realidad yo no sabía qué negocio tenía su
papá. Ya en la Universidad me comentó
que requerían a alguien en el área de Ventas
aquí en Aguascalientes; como yo me dedicaba
en ese momento a las ventas, pero
de partes eléctricas de autos, me animó a
mandar mi currículum”, recuerda.
Su primer contacto fue con Héktor Saldaña,
gerente de la oficina hidrocálida, y
después de tres meses de prueba, con su
esfuerzo y dedicación se fue ganando la
confianza de su equipo.
UN GRAN POTENCIAL
“Estudié la Licenciatura en Cultura Física y Deporte, nada que ver con el medio, pero no había oportunidad de trabajo para el fomento deportivo; al empezar las ventas en el turismo veía que todos se movían como peces en el agua, me preparé y sobre todo me enfoqué en escuchar y atender a mis agentes de viajes y le empecé a agarrar cariño a este medio, que es muy bonito”.
Otro detonante que lo ha hecho permanecer en NaturLeón es el ambiente de trabajo de su oficina, donde se apoyan continuamente al punto de considerarse hermanos, ¡y qué decir del convivio con los agentes de viajes! Con ellos ya no sólo comparte folletería o capacitaciones, hablan de familia y hasta se piden consejos.
“Mi reto era ganarme la empatía de las personas, la clave de las ventas es que hagas clic con los demás, yo tenía miedo de que me rechazaran porque entré muy joven, sentí que no me verían igual, pero afortunadamente no fue así”.
LAS RUTAS DEL ANTOJO
Como todo ejecutivo de Ventas, al realizar sus rutas tiene aquéllas predilectas, por lo pecaminosas que pueden ser gastronómicamente o por los bellos paisajes que albergan.
Para Emmanuel, el tour de antojitos es lo suyo, por lo que recomienda el Pueblo Mágico de Calvillo, Aguascalientes, donde debes hacer parada obligada en las nieves y sus panes típicos.
“EL TURISMO SE HA CONVERTIDO EN ALGO QUE LLEVO EN MIS VENAS, ME ENAMORÉ DEL MEDIO Y ES DIFÍCIL DEJARLO, SÉ QUE QUIERO SEGUIR EN ESTO Y SÍ, TENGO LA CAMISA BIEN PUESTA”.