Paisaje mágico en el fam a Guatemala con el INGUAT y Volaris
Es conocido de todos que Volaris cuenta ya con sus más de 160 vuelos diarios de y hacia ciudades de todo México e incluso de los EE.UU. y Centroamérica, y hace poco transportó a su pasajero número 50 millones; a esta serie de destinos hoy podemos sumar uno más hacia el vecino país de Guatemala, que a pesar de su cercanía con México muchos no conocemos, y que con la recién inaugurada ruta Guadalajara-Guatemala ahora queda a sólo un par de horas de distancia.
Este viaje comenzó como de costumbre, con los ejecutivos de la aerolínea inaugurando el nuevo vuelo en la Perla Tapatía; allí estaba Graciela Salazar, delegada en México del Instituto Guatemalteco de Turismo (INGUAT), quien fue la encargada de cortar el listón. Fue de llamar la atención que el avión estaba pintado para la ocasión con una guitarra en su costado, aunque esto no sería lo único diferente en este viaje.
Como se usa en estas ocasiones, los pasajeros experimentaron desde el “bautizo” de la aeronave hasta el mariachi a bordo y el sorteo de muchas cortesías y vuelos, pero el detalle especial esta vez fue que nos acompañó su director general, Enrique Beltranena, para quien esta ruta es muy significativa ya que el CEO de la aerolínea es guatemalteco; destaca su carisma y sencillez al convivir con el resto de los pasajeros y hacerse partícipe de la inauguración, tomando el altavoz en ocasiones para invitarnos a disfrutar la travesía, lo que nos da la idea de la importancia que su empresa les da a quienes viajan con ellos. Al alcanzar los 10 mil pies de altura, entre repartos de playeras y canciones de mariachi, los viajeros aprendieron a jugar lotería guatemalteca, cantada por el mismo Beltranena.
Al llegar al destino y después de una migración muy sencilla y rápida el grupo fue conducido al hotel donde se llevó a cabo la rueda de prensa; nos encontramos con una larga mesa cuyos lugares estaban reservados no para autoridades o representantes del aeropuerto, sino para los integrantes de la banda Alux Nahual, conocidos de toda la vida del director de la línea aérea, quien nos platicó que uno de sus sueños era contribuir con la conectividad de su país y esta inauguración lo cumple, por lo que quiso compartir este triunfo con sus amigos de la juventud; aprovecharon la ocasión para anunciar que tocarán en cielos mexicanos y guatemaltecos, ya que próximamente darán un concierto durante un vuelo especial de la nueva ruta; actualmente los integrantes de Alux se encuentran en Guadalajara, gestionando la adecuación de la aeronave para este evento, y la dinámica para ganar boletos se lleva a cabo en las redes sociales de la aerolínea, involucrando a blogueros y personajes conocidos en ambos países, para que los interesados estén al pendiente de los sorteos de lugares.
Antes de hospedarte en uno de los hoteles de la “Zona Viva” de Guatemala capital, puedes realizar un tour panorámico por el centro, admirando su Catedral Metropolitana, la Basílica de Santo Domingo, su Palacio Nacional, el Paseo de la Sexta y más, con un sabor decididamente latino y una sensación de estar caminando por alguna ciudad de México, aunque por todos lados encuentras a personas vestidas con atuendos indígenas nunca vistos en nuestra República. Como toda capital, Guatemala es el centro cultural de su país, y en sus calles puedes encontrarte con sorpresas como el café La Galería, que recibe a muchos intelectuales y artistas plásticos de la ciudad, y pasar un rato muy agradable en compañía de autores como David Mejía, un artista salvadoreño que exhibe sus obras en las paredes de este establecimiento que como muchos puntos de reunión dan espacio para que los artistas emergentes expongan sus trabajos.
Viajando al pasado en La Antigua
La Antigua Guatemala es una escala obligada cuando visitas este país, y se encuentra a 45 minutos de la capital. La ciudad se llama así porque efectivamente es la antigua capital de Guatemala (de hecho una de las tres que el país ha tenido en su historia; ya fueran terremotos, erupciones volcánicas o inundaciones, tanto ésta como La Vieja Guatemala, la primera capital, fueron abandonadas, aunque en la actualidad tienen grandes poblaciones). En La Antigua el edificio más alto es el Ayuntamiento, de dos plantas, así como las torres de las iglesias. Date la oportunidad de conocer dos de sus lugares icónicos: el Hotel Inmaculada y el Hotel Casa Santo Domingo; en el primero los integrantes del FAM fuimos invitados a disfrutar de una de las mejores comidas que hemos probado en mucho tiempo, cuya presentación sencilla pero elegante sólo resaltó su fabuloso sabor; en el segundo es recomendado quedarte a cenar y admirar su fantástica construcción que tomó las ruinas de un antiguo convento como base para crear un hotel único, respetando los trazos originales a tal punto que puedes caminar por un pasillo y observar dónde termina un viejo arco y comienza la construcción moderna (incluso hay ciertas zonas del edificio sin electricidad para respetar su ambiente y concepto).
Esta ciudad designada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO regala postales hermosas como la vista de los volcanes que la rodean (el De Fuego, el Acatenango, el de Agua y el Pacaya), sus edificios y su gente, como las señoras en traje típico y cargando canastas en la cabeza, cuyas creencias o timidez les impiden dejarse fotografiar en ocasiones. Siendo uno de los países más diversos del mundo, Guatemala cuenta con una pluralidad cultural enorme y sus habitantes hablan más de 20 idiomas diferentes, destacándose los de origen maya; sus autoridades turísticas incluso nombran a este país como la Capital del Mundo Maya, y en tu visita puedes constatar que ese sentimiento de pertenencia a una cultura milenaria está muy arraigado entre sus pobladores. Si lo que buscas es una probadita del turismo ecológico que cada vez se pone más de moda, puedes tenerla con la visita a una plantación de café como la del Centro Cultural La Azotea, donde conocerás los interesantes procesos por los que pasa el grano hasta convertirse en la bebida que disfrutamos todas las mañanas.
Guatemágica
Los aventureros tienen gran variedad de rutas a elegir en este verde país, pero además algo que puede sorprenderte es Guatemágica; caminando hacia la frontera con México, cerca de Retalhuleu, esta propiedad del Instituto de Recreación de los Trabajadores de la Industria Privada de Guatemala (IRTRA) cuenta con un complejo hotelero llamado Hostales del IRTRA, con temáticas de todo el mundo: coloniales, polinesias, mediterráneas, mayas… todo enclavado en un enorme terreno con canchas deportivas, albercas, restaurantes y spas, así como edificios donde además de las habituales instalaciones de entretenimiento, puedes divertirte usando las líneas de boliche; el IRTRA cobra una cuota fija a sus empresas afiliadas para que los trabajadores puedan vacacionar en sus desarrollos, pero la entrada está abierta a todo el turismo.
Guatemágica cuenta también con las atracciones de Xetulul y Xocomil; el primero es un parque de diversiones con juegos mecánicos, espectáculos y shows ambulantes, todo ambientado como si estuvieras haciendo un recorrido por el mundo, ya que existen escenografías y reproducciones a escala de los lugares más icónicos de África, Europa, América, con una impresionante atención al detalle y personajes que hacen que los visitantes pasen un excelente rato. Por su parte, Xocomil es un parque acuático como pocos, ya que además de los típicos toboganes y albercas, existe una impresionante estructura que de lejos parece una montaña rusa, pero que en realidad es un tobogán que con un ingenioso sistema hidráulico permite que los viajeros suban y bajen en sus kayaks inflables de una manera casi mágica, junto con simuladores de olas, toboganes y atracciones extremas pero bien pensadas y muy seguras.
Finalmente, nuestros anfitriones nos retaron a vivir la experiencia de escalar el volcán Pacaya, muy cerca de La Antigua y cuya última erupción en 2014 rompió su cráter y formó caminos de lava donde pudimos tomarnos fotografías; la condición física no es pretexto ya que los lugareños rentan caballos, y la satisfacción de conquistar su cima y contemplar el paisaje que se antoja como de otro planeta, con la hermosa vista de la cadena volcánica y la ciudad muy abajo, es algo que se queda grabado en la memoria; es imperdible comprar recuerditos en la tienda Lava Store que se encuentra en sus faldas. El premio para nuestras cansadas piernas fue disfrutar de un spa que utiliza las aguas termales del volcán como parte de sus servicios.
Guatemala nos deja con un buen sabor de boca, rompiendo las ideas que teníamos de este país lleno de paisajes mágicos y habitantes amables, cuyas culturas parecidas a la nuestra nos hicieron sentir como en casa desde que llegamos hasta el momento en que le dijimos adiós a este corazón latiente del mundo maya.